Sigue la conmoción por la muerte de un transeúnte inocente a manos de un abogado que perseguía a motochorros en Buenos Aires

Clarín, La Nación, Página y los populares dan cuenta de la muerte de Daniel Fernando Rodao De Negris –de 55 años, cerrajero– quien murió por un disparo por la espalda luego de que un abogado y ex militar (Silvio Guillermo Martinero) fue asaltado por dos motochorros cuando estaba entrando al edificio en el que tenía su estudio y respondió a los tiros, sin medir consecuencias, entre medio de la gente.

Según editan, Martinero tenía la “portación” vigente pero tenía caducado su permiso de “tenencia” (posesión de arma) desde octubre de 2015, lo que invalidaba su situación.

Sergio Dima, en Clarín, considera que fue un “crimen absurdo” que disparó el “debate” por el “uso y la circulación de las armas en el país”. El matutino da cuenta que según fuentes del RENAR (el registro oficial), hay sólo 150 civiles en todo el país autorizados a portar armas (llevar armas cargadas encima). Pero cuando se mira a los militares y miembros de fuerzas de seguridad retirados, los permisos son 22.000, que se deben renovar cada año.

El gran diario argentino afirma que el abogado, Silvio Guillermo Martinero, “había disparado al menos seis tiros entre la gente, que buscaba refugiarse sin entender qué pasaba”. Además, subraya que “su nombre aparece vinculado al mundo de las finanzas y fue involucrado en la trama del tráfico ilegal de la efedrina y la mafia de los medicamentos”.

Para Gabriel Di Nicola, en La Nación, el abogado “disparó para evitar que le robarán” y sostiene que “aunque su abogado insistió ayer en que se trató de un caso de legítima defensa ante un asalto a mano armada (le robaron una mochila que, aparentemente, tenía 50.000 dólares), Martinero, de 46 años, quedó detenido por homicidio simple y será indagado hoy por el juez porteño Luis Zelaya”.

A Página le sorprende la actitud de Martinero cuando “pasa corriendo sobre la calzada, pasa al lado de su víctima, apenas aminora la corrida y sigue como si nada hubiera sucedido”. Además, advierte que “casi ninguno se detiene a ver qué le pasó al cerrajero”.

Ámbito también da cuenta de las escenas de “pánico en la City” y afirma que “la prueba clave” es un video de una cámara de seguridad que ya se encuentra en poder de los detectives de la Policía Federal.

Información extraída de:

http://www.diariosobrediarios.com.ar/dsd/notas/1/38101-impacta-la-muerte-de-un-inocente.php#.VvwNeeLhCUk